Este jueves, el vicepresidente brasileño, Hamilton Mourão aseguró que el país se encuentra en un colapso sanitario por coronavirus, con un número de víctimas fatales que “ya superó el límite del sentido común”.
“Ahora enfrentemos lo que hay e intentemos por todos los medios reducir la cantidad de personas infectadas y, obviamente, la cantidad de muertes que, bueno, ya traspasó el límite del sentido común”, dijo el vicepresidente sobre la situación actual de Brasil, donde se superó las 3000 muertes diarias por Covid-19.
Aún en estas condiciones, Mourão insiste en su postura de mantenerse en contra de la idea de un confinamiento general y dijo que cualquier restricción debería ser decidida por gobernadores y alcaldes.
Como medida paliativa, el vicepresidente comentó la decisión de crear un comité con miembros del Ejecutivo y Legislativo para coordinar la lucha contra la pandemia.
La cifra de muertos por coronavirus en Brasil, que el último miércoles superó los 300.000, podría llegar a 400.000 en dos meses o incluso antes si el Gobierno del presidente Jair Bolsonaro se sigue negando a adoptar una cuarentena nacional, advirtieron autoridades de salud.